Tapicería Exterior

Tapicería Exterior

Consiste en renovar un mueble como sillones, cabeceras, sillas, etc., o algún accesorio decorativo como cojines, almohadas, cabeceras, etc., que actualmente luce deteriorado y dañado con un nuevo tejido seleccionando de entre una gran variedad de diseños de telas.

La mayoría de las telas para tapicería están elaboradas 100% con poliester; una fibra sintética ampliamente valorada en la industria textil por propiedades como resistencia a la humedad y el sol, ligereza, higiene y elasticidad.

A diferencia de las telas para interior las telas de exterior deben ser resistentes a las condiciones del exterior como lluvia, sol extremo, heces de aves, moho, polvo, etc., por esta razón, los hilos se realizan mediante un proceso de teñido en masa donde se aplica el color antes de realizar la confección del tejido. Es decir, la fibra acrílica se encuentra en estado líquido cuando se añade el color. De este modo, el color está sellado en el interior de los hilos y no es posible que pierdan color por causa de sol, desgaste u otros elementos que puedan dañar su apariencia original.

Aunque los tejidos para exterior son mucho más resistentes que los tejidos de interior, se recomienda hacer una limpieza periódica para mantener en óptimas condiciones el tejido. Se recomienda limpiar con jabón neutro y agua por lo menos una vez al mes. También está permitido el uso de algunos limpiadores especializados para la limpieza de telas. Gracias a que el color de algunas telas de exterior está en todo el hilo, puede hacerse uso de cloro sin dañar la apariencia del tejido.

La durabilidad de una tela para tapicería exterior puede variar en cada caso particular dependiendo de la exposición a factores ambientales como rayos UV, viento, polvo y algunos otros factores, sin embargo, haciendo un buen de la tela, el tiempo promedio de vida puede ser de aproximadamente 8 años.

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